Algunas amigas mías han desistido de organizar viajes en familia cuando alguno de sus hijos llega a la adolescencia. Piensan que así se liberan de las malas caras, de los cambios continuos de humor, de los enfados y de las protestas…
Yo no me rindo, una vida sin viajar es como un río sin agua…
Viajar supone conocer a nuevas personas, nuevas culturas, costumbres y lugares. Permite poner en prespectiva la propia vida y la propia forma de hacer las cosas. Enseña que no todo es uniforme, que hay cosas distintas y permite aprender que todas esas diferencias son compatibles con el mundo. Aprender todo eso durante la adolescencia ofrece a los hijos un importante equipaje para su futuro…
En este apartado compartiré ideas para viajar en familia… experiencias nuestras y algún que otro sueño, que soñar es gratis…espero que pasemos un buen rato!